Recuento de 6 semanas sin saberlo:
Estaba trabajando con contrato indefinido ds secretaria de gerencia en un colegio, lo que me permite mantener a mi hija el día de hoy. Me habian subido el sueldo unas semanas atrás y recién habia comenzado un Diplomado en la universidad católica.
Los viernes y sabados en las noches estaba trabajando de anfitriona en el Bar Constitución. Durante la semana generalmente iba al bar a ver los grupos de música que iban a tocar.
Llevaba tres semanas tomando medicamentos para el insomnio, Estaba bajo peso, mi estatura es 1.71 y pesaba 55 kg. Me estaba alimentando mal, durmiendo poco, tomaba alcohol y abusaba de las bebidas energeticas.
Una semana antes de enterarme viví un episodio emocional muy fuerte...
Cundo fui ver a mi genicologo me dijo que por todo lo que habia pasado hacia atrás la bebe podría estar mal.
Agende una ecografía para tres días después, la noche anterior al exámen me arrodille llorando sobre mi cama y entre la desesperación el miedo y la desaprobación de esa vida para el padre de ella, ore a Dios e hice un pacto con él. Si mi bebe estaba bien desde ese día dedicaria mi vida entera a cuidarlo y protegerlo por sobre todo, incluyendo mi propia estabilidad, y él cuidaría de ambos.
Al día siguiente en aquella pantalla apareció un porotito en perfectas condiciones y un ritmo cardiaco perfecto.
Salí de la consulta, llamé a su papá y le dije que no me importaba que pensara él, yo amaba esa vida y no lo necesitabamos.
La segunda llamada fue a mi padre, nos juntamos y le conté la noticia.
La tercera llamada fue al Bar, presenté mi renuncia.
Desde ese preciso momento mi vida cambio.
Angela Estefanía Méndez Polanco.
Lloré con tu relato. Sé lo difícil que es pensar que la vida de tu bebé corre peligro. Dios también fue mi unica alternativa. En ese momento te das cuenta lo fragil que es la vida y lo poco que uno puede hacer para conservarla. Finalmente la vida depende de El. Gracias A Dios Sofi està bien y puedes disfrutar de su presencia. Es un tesoro la vida y eso hace que por más dificil que nos sea la maternidad en algunos momentos, todo vale la pena por tener a nuestros hijos aanos y fuertes. Saludos y un abrazo!
ResponderBorrarJamás dejare de agradecerle a Dios por darme esta oportunidad. Un hijo es todo para una madre. Mi vida cambio y soy inmensamente feliz de aquello.
ResponderBorrarUn abrazo